Cuando los propietarios necesitan acceder al valor que han acumulado en sus viviendas, dos opciones populares son los Préstamos sobre el Valor Neto de la Vivienda (HEL, por sus siglas en inglés) y las Líneas de Crédito sobre el Valor Neto de la Vivienda (HELOC, por sus siglas en inglés).
Ambos tipos de préstamos permiten a los propietarios obtener fondos para diversos fines, como mejoras en el hogar, consolidación de deudas o gastos inesperados. Sin embargo, es fundamental comprender las diferencias entre estos dos productos hipotecarios para tomar una decisión informada que se ajuste a sus necesidades y objetivos financieros. A continuación, algunas diferencias importantes entre ambos.
Préstamo sobre el valor neto de la vivienda
Un préstamo sobre el valor neto de la vivienda es un préstamo único que le proporciona una suma global de dinero que se paga durante un período fijo, generalmente entre cinco y treinta años. La tasa de interés de un préstamo sobre el valor neto de la vivienda es fija, lo que significa que se mantiene igual durante toda la vida del préstamo, y sus pagos mensuales también son fijos.
Una ventaja de un préstamo sobre el valor neto de la vivienda es que sabe exactamente cuánto está pidiendo prestado y cuáles serán sus pagos mensuales, lo que facilita la planificación del presupuesto. Además, dado que la tasa de interés es fija, puede estar seguro de que sus pagos no aumentarán si las tasas de interés suben.
HELOC
Por otro lado, una línea de crédito sobre el valor neto de la vivienda (HELOC) es una línea de crédito revolvente de la que puede disponer según sea necesario hasta un límite predeterminado. Solo paga intereses sobre el monto que utiliza y puede usar los fondos para una variedad de propósitos, como renovaciones del hogar, consolidación de deudas u otros gastos. Los HELOC generalmente tienen una tasa de interés variable que puede cambiar con el tiempo, y sus pagos mensuales variarán según el monto que utilice y la tasa de interés.
Un HELOC puede ofrecer más flexibilidad, ya que puede disponer de la línea de crédito según lo necesite y solo pagar intereses sobre el monto que utiliza. Esto puede ser beneficioso si tiene gastos continuos o proyectos que requieren financiamiento a lo largo del tiempo.
En última instancia, la elección entre un préstamo sobre el valor neto de la vivienda y un HELOC dependerá de sus necesidades individuales y situación financiera. Es importante considerar cuidadosamente los términos y las tasas de interés de cada opción antes de tomar una decisión.